martes, 26 de febrero de 2013

Actividades del semestre 12B y del 13A

El semestre pasado, como informé previamente, los chicos del plantel y una servidora realizamos múltiples actividades para favorecer la comprensión y acercamiento a la lectura. Para muestra, basta un botón... o las fotos, donde se aprecia que los muchachos que asiduamente iban a nuestras reuniones sabatinas están súper entretenidos recreándose en los libros que nos dan el Conaculta y la SECAY.
Acerca de la ùltima depedencia antes referida debo agradecer la presencia en nuestro plantel Chenkú del Director de Literatura y Promoción Editorial, el Mtro. Jorge Cortés Ancona, quien el pasado 14 de Febrero, día del amor y la amistad, realizó en el auditorio la conmemoración de los cien años del natalicio del escritor Carlos Medina. Las imágenes evidencian no solamente la concreción de este encuentro de los jóvenes con la cultura, sino el interés que despertó el Mtro. Cortés Ancona en mis chicos.

domingo, 10 de febrero de 2013

Encuentro de jóvenes con aspirantes a escritores 1

Cuando uno está en esta labor de promoción de las bellas letras, y máxime si tiene formación en humanidades (estudié profesionalmente Filosofía), no es dudoso sospechar que aspire a crear y ser parte de los escritores que realmente destilan tinta o los dedos sobre el teclado del ordenador, como dirían los vecinos del otro lado del Atlántico.
Y si se le agrega a lo anterior que ese uno conoce a otros que tienen su misma inquietud, de escribir, y que aparte se gana el pan decentemente como docente de Nivel Medio Superior, entonces tenemos, y perdón el exceso de modestia (a veces el autoaplauso es necesario), a alguien que de verdad tiene el compromiso por contagiar a las jóvenes promesas del futuro a seguir su ejemplo.
Esa fue mi intención para reunir a mis muchachos de preparatoria con los colegas que, así como yo, cualquier cosa pueden ver mi otro blog de creación literaria titulado El mundo bajo mi cristal; se interesan por hacer buena literatura, no de esas que se confunden con periodismo o con catarsis expiatorias de los demonios que llevamos dentro, las cuales abundan en los libros recientemente promovidos en las vitrinas.
Con cierta humildad, exceso más bien, presumimos nuestras obras los escritores Juan Pérez, Gerardo Zetina, Paty Aguilar y una servidora, Erika López, a los chicos de 15 y 16 años a los que les daba clase, así en pasado, porque por azares de la vida he tenido muchas complicaciones obrero-patronales-laborales-económicas, entre donde doy clase y otras instituciones, que me han alejado del camino de postear las labores que realizo sin lucro alguno en Chenkú.
Tengo la certeza de que nadie leerá lo anterior, y que mucho de lo que hago es infructuoso porque hay muy poco entusiasmo tanto de colegas docentes que minimizan mi trabajo, como hasta de mis mismos alumnos por seguir esta dinámica a favor de las artes y la cultura. Sorpresivamente el mismo ánimo veo en los dirigentes del PNSL y de quienes tienen la responsabilidad de dar el visto bueno, apoyar e incentivar a otros "como yo". Es una lástima... pero como dicen, "vivimos en México", acá la ley que se aplica es la del vanidoso político que solamente se alza el cuello blanco (y de marca) en actos oficiales sin realmente tener cabal conciencia del esfuerzo de los que estamos hasta abajo del organigrama social, que somos los que realmente construimos las partes del tejido social, dando nuestros aportes al futuro.
Quizá las cosas cambien. A lo mejor mis alumnos acaban siguiendo mis pasos. Tal vez algún día logre tener un salario más justo y una editorial de prestigio se fije en mi obra sin tener que pasar por el trámite de "ganar beca nacional-estatal" o recurrir al tráfico de influencias para pasar de la publicación electrónica al codiciado papel impreso.
Mientras tanto, acá seguiré labrando de a poco este camino en pro de la mejoría social, porque qué otra cosa será eso de escribir y crear, leer y pensar, que abrir la conciencia hacia mejores formas de vida.

Encuentro de jóvenes con aspirantes a escritores 2












Cronograma a destiempo

Admito que ya pasó bastante tiempo, pero nunca es tarde para presumir las actividades que realizamos en la Sala de Lectura, por lo que muestro el cronograma de trabajo que los chicos del semestre 12A y una servidora realizamos.
Septiembre.
Poesía.- Realizamos las lecturas de Pessoa, infancia sin fin; Nada que ocultar, Herida luminosa, Canciones para sobrevivir, Poesía de Alí Chumacero. Como dinámica se llevó al cabo una lectura en voz alta con creación derivada: cadáver exquisito y "mi primer poema".
Narrativa.- Leímos el cuento La expulsión del paraíso, Ida y vuelta del pueblo sin nombre, Mundos paralelos y otros cuentos. También realizamos lectura grupal en voz alta con creación derivada.
Otro cuento que leímos fue Cómo se salvó Wang Fo, Nana Vieja, solamente que para tales obras hicimos una tertulia, es decir, comentamos nuestras impresiones.

Octubre.
Narrativa, la crónica.- En este mes leímos los libros multilingües Los hilos que nos tejen, Niños de México, Ventana a mi comunidad, Nelson Mandela, Tsunami, Escribir América. Como parte de la creación derivada, con la que se entrelaza la lectura y la escritura, los asistentes a la sala hicieron crónicas de su día a día.

Noviembre.
Estética.- Leímos El arte para comprender al mundo, Manchas, Bozo, Camuflaje. El juego de las miradas, Garabato. En realidad, los asistentes aprovecharon el tiempo para sacar a relucir su aspecto como creadores de la plástica y crearon obras originales donde la narrativa cedió paso a la ilustración, por lo que los diálogos de tales trabajos fueron meramente visuales.
Narrativa, la novela.- Igualmente se leyó en este mes el Diario del coronel Mejía, algunos capítulos de El complejo de Faetón y de A piedra y sol maya. La invitación siempre fue generar el espacio para incentivar la lectura en casa a partir del breve conocimiento de las obras antes señaladas.

Diciembre.
Dramaturgia.- Leímos Nuevos dramaturgos de Veracruz, de Emilio Carballido, Rosa de dos aromas. La lectura fue dramatizada por los asistentes a la Sala de Lectura, permitiendo que se mostraran los lados de histrionismo de los muchachos.
Narrativa, la crónica.- Asimismo leímos Luz y lunas, lunitas; Los 1000 y un velorios, 1440 minutos en el ombligo. Como ya habíamos introducido este género en meses anteriores, fue fácil retomar el camino y reemprender la tarea de la crónica casera reportando el diario acontecer.